Descripción
- Cruz de cáliz 25mm
Es el vaso sagrado donde se echa el vino para consagrar la misa.
El sacerdote levanta el cáliz para los asistentes durante la misa y recita las palabras de la consagración, estableciendo “este es mi cuerpo”. Tiene un valor simbólico significativo, representando la sangre de Jesucristo.
Los cálices son una parte integral de la práctica católica, representando un concepto sagrado conocido como la Eucaristía. El sacerdote conduce el procedimiento con el cáliz (lo que involucra la Santa Comunión) y la congregación consume una pequeña cantidad de vino y pan. Combinado con el vino como sangre de Cristo, el pan simboliza el cuerpo de Cristo. Tiene tres propósitos. Primero, es una promesa de vida eterna. Segundo, provee crecimiento espiritual. Finalmente, el cáliz, vino y pan sirven para proveer nutrición espiritual.